Rehabilitación de Masía en l’Anoia.

Un cambio de vida, cambio de paisaje y cambio de aires. Una familia que vive en Barcelona y decide trasladarse a Pujalt, un municipio de la comarca de l’Anoia.

Piedra, mucha piedra, paredes de cincuenta centímetros de grosor, huecos sin carpinterías, restos de los corrales y los bebederos de los animales que habitaban en la casa así como la prensa de la miel y la gran chimenea de piedra que presidía una de las sala.

Empezamos el proyecto con ideas que iban y venían entre salas y rincones, espacios que se descubrieron tras muebles acumulados con los años y que entre la penumbra de una casa abandonada se dejaban entrever si algún rayo de sol se colaba por alguna rendija.

Un proyecto trabajado por fases y a lo largo de los meses, el paso de las estaciones ha ido modificando la distribución a medida que se iba descubriendo cómo respondía la vivienda a los diferentes climas y las diferentes horas de sol.

Se han  rehabilitado los forjados, las escaleras y cubierta, se ha replanteado la distribución para dar lugar a una vivienda funcional para una familia grande. Se han restaurado las paredes de piedra que se habían cubierto de mortero y se ha recuperado el pavimento de barro cubierto por años y años de paja.

Una vivienda que los años irá vistiendo, a medida que crezcan los arboles frutales y el huerto en el gran jardín que la rodea produzcan sus frutos.

En la planta de acceso se encuentra una gran sala con la cocina abierta, el lavadero, un lavabo y un almacén, en la planta superior la zona de las habitaciones a través de la cual se accede a la última planta bajo cubierta donde encontramos un espacio diáfano con múltiples usos posibles.

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